El proyecto aborda el problema del declive de las poblaciones de insectos polinizadores, esenciales para la producción de alimentos y la biodiversidad. Las principales amenazas incluyen cambios en el uso del suelo, pesticidas, especies invasoras y el cambio climático.
A pesar de iniciativas existentes, la falta de información y coordinación entre actores limita su impacto. Así, el objetivo de este proyecto es mejorar la conservación y protección de los polinizadores silvestres y domesticados, beneficiando la biodiversidad, los ecosistemas y la productividad agrícola.
Es ejecutado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en colaboración con los gobiernos de Brasil, Chile, Costa Rica, México y Perú, enfocándose en la creación de una plataforma regional para intercambiar buenas prácticas y conocimientos.
Los resultados esperados incluyen:
1) Realización de un workshop regional para intercambiar conocimientos sobre el estado de los polinizadores;
2) Implementación de cursos de autoaprendizaje online sobre conservación y uso sostenible de polinizadores;
3) Creación de una red de intercambio de buenas prácticas para la protección de polinizadores.
El proyecto se alinea con las estrategias nacionales de los países participantes y con iniciativas internacionales como la Iniciativa Internacional para la Conservación y Uso Sostenible de Polinizadores (IPI).
El proyecto busca fortalecer las capacidades de los actores locales y promover la participación de mujeres y comunidades rurales en la conservación de polinizadores.

